Stand up, al agua Patoooooooo.....

Como quien recuerda su primer día de clases en el Jardín de Infantes, y luego de ver varios vídeos de Paddle Surf, decidí encajarme el traje de neoprene y tomar mi nuevo tablón de Sup para comenzar con esta nueva experiencia.

No fue muy difícil cruzar la Costanera para llegar a la Playa, cabizbajo y tranquilo me pose sobre la arena, sin dejar de lado la sensación que me daba iniciarme en esta nueva disciplina me dirigí hacia la orilla, mientras a lo lejos un par de observadores se preguntaban que iba a hacer este loco con una tabla de surf y un remo, por supuesto no me di por aludido y saque la entereza que me caracteriza ante momentos como este jaja.

Primer Día: Mamitaaaaaaaaaa!!!!!!. Por la mañana me puse de acuerdo con Marcelo Deambrosio, conocido surfista que emprendió en paralelo el camino del Kayak, con lo que me ayudaría su presencia a familiarizarme un poco con el tema del remo y sus funciones. El mar estaba calmo son alguna onda gorda que se formaba en el fondo pero sin agresividad, brisa suave y un sol que de a poco se escondía entre las nubes dando un clima especial para la practica.

Comencé a remar de rodillas sobre el Supboard, lo que me daba mayor estabilidad y de alguna manera me permitía reconocer el punto de equilibrio de la tabla, así llegue a pasar la pequeña rompiente.

Una vez adentro y después de remar varias veces intente hacerlo de parado, lo que me sorprendió lo completo de esta disciplina ya que la primera sensación fue la de estar sobre una gelatina, activando prácticamente todos los músculos desde mis caderas hasta los pies, siendo los tobillos y pies fundamentales para lograr el equilibrio. Prácticamente estuve unos 40 minutos tratando de lograr familiarizarme con la Tabla y el remo, cosa que por ser el primer día me costo bastante, mezcla de frustración y fastidio pero también el inicio de un nuevo objetivo.

Segundo y Tercer Día: Luego de pensar y seguir viendo vídeos y preguntarme una y otra vez cuales fueron los errores y virtudes, volví al mar con mas decisión para trabajar el tema del punto de equilibrio y también fortalecer mis músculos y articulaciones, tenia la obligación de reforzar esas áreas que con el tiempo fui dejando de lado y que ahora necesitaba al 100 %.

Con un día calmo pero mas ventoso, encare la corriente y reme por una hora y media aproximadamente ambos días, en paralelo a la playa y entrando y saliendo de forma perpendicular, de rodillas y de pie, con la sola idea de reforzarme física y mentalmente. Y los resultados fueron positivos, intentando correr las olas y logrando solo de rodillas, tardaría un tiempo mas para tomarlas en posición de pie y correrlas, pero no faltaría mucho.

Cuarto Día: Lo Logreeeee!!!!!!!! Como explicar lo que se siente correr unas olas en esta disciplina, simplemente sentí como cuando logras un imposible, la sensación plena de llegar a cumplir el objetivo propuesto, en fin, pura felicidad. Luego de dejar a mi Familia en el Trabajo y Escuela, volví a mi Negocio y por las tres de la tarde ya estaba en la Playa. Día Glassss, Ondulado con una pequeña correntada hacia el norte pero no agresiva, Olas perfectas para correr en longboard lo que auspiciaba una buena tarde para saber lo que es surfear en Sup.

Camine hasta la Playa y 36 donde aviste un grupo pequeño de Surfers y entre arrodillado sorteando de muy buena manera las espumas que me sobrepasaban, llegando así al fondo donde me pare y reme de a pie unas cuadras hasta llegar al legendario Muelle de Santa Teresita.

Ahí se encontraba un viejo surfer, Diego Portela, el cual se encontraba con un longboard corriendo lindas olas.

La ondulación se hacia cada vez mas prominente lo que me permitió practicar la remada para tomarlas de a poco, y familiarizarme con el Paddle Surf.

Cometí los primeros errores que fueron corregidos al instante por sugerencias de surfers que estaban junto a mi, y asi tome mi primer ola....Yeeeeeaaaaaaaaahhhhhhh, hasta la orilla mannnnnnn....jajaja

Di media vuelta y volví a entrar, chocando con las espumas que no detenían mi paso, llegue nuevamente al fondo y así me pase aproximadamente dos horas y media entrando y saliendo corriendo una y otra ola, inolvidable, realmente inolvidable.

Luego de surfear placenteramente, decidí volver unas cuatro cuadras remando tranquilo hasta la altura de la Hosteria, lo que me permitió al final correr una olita de despedida, agradeciendo a Dios la gran tarde que me hizo pasar.

Hacer Paddle Surf, Surfear las Olas hoy es una realidad y ahora estoy recebado y quiero masssss!!!!

Saludos y no olviden "En la Arena solo deja tus Huellas..." Cuidemos nuestro medio ambiente costero.